Quise llamarte Flor
pero la flores
son tan vistosas
que no quise llamarte así.
Pensé en lucero,
pero aún estás muy cerca.
Chanzará,
y recordé que sus aguas
son muy turbias todavía.
Pomarrosa,
quise en principio para tí,
pero no te viene bien pomarrosa.
Creí en Satinga,
y me pareció
que está bien para una gatita.
Recordé a Sande,
Tangare,
Chonta,
Sanquianga...
He agotado todos los nombre
para llamarte
y ninguno ha llenado
mis oídos.
Saija,
¿ Te gusta Saija?La luna de los enamorados
Como la fina curvatura
De unos labios de espadas.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario